Cuando se realizan labores de reacondicionamiento o ampliación de instalaciones eléctricas, es importante contar con un plano para prever riesgos asociados al uso de la energía.
Es de público conocimiento que, al momento de pensar en la construcción, ya sea de una vivienda o cualquier otro inmueble donde exista el uso de instalaciones eléctricas, debes tomar en cuenta la planificación de ella; esta planificación incluye el tamaño de las habitaciones, ubicación de los muebles, jardineras, entre otros.
Estas consideraciones se documentan, a manera de dibujo, en el plano arquitectónico, con indicaciones puntuales en cuanto a dimensiones, acotamientos y orientaciones.
En el plano arquitectónico es posible plasmar otros sistemas como -por ejemplo- la red de distribución de agua potable, gas y red sanitaria; en ocasiones este plano se repite dependiendo de la cantidad y complejidad de la distribución, es por eso que muchas veces se manejan 3, 4 o más planos con cada una de las redes que se desean representar, una de ellas es la del sistema eléctrico.
Para quienes calculan y ejecutan la obra eléctrica, es sumamente importante contar con este documento, ya que se puede visualizar el mejor lugar para ubicar los componentes del sistema eléctrico, y por lo tanto lo necesario para que la distribución y uso de la energía sea más eficiente, y sobre todo segura, para los ocupantes.
Una vez teniendo el plano, se lleva a cabo lo que se conoce como un “sembrado” de equipos y accesorios; las salidas de luminarias son puntos clave en busca del confort de los ocupantes y generalmente se realiza junto con el usuario final, o bien realizando una propuesta para ser revisada.
Lo anterior descrito es la forma correcta de trabajar, sin embargo, en ocasiones te puedes encontrar que lo físicamente instalado no corresponde a lo representado en el plano.
El uso más común que se le da a este documento es al momento de solicitar un mantenimiento, ampliación o reparación de alguna falla. El tener actualizado el plano eléctrico es sumamente útil, pues permite cotejar las tablas que aparecen en él, con mediciones en el momento de estar ejecutando algún trabajo. Como electricistas profesionales, es obligación siempre registrar las modificaciones en el plano, manteniéndolo actualizado.
Beneficios de la tecnología Antiguamente, los planos se generaban a mano y hacer duplicados era una labor difícil, ya que no era posible fotocopiarlo o imprimirlo, como hoy en día que gracias a la computadora se puede mover, quitar o agregar componentes de forma fácil y directa.
Existen diversos medios electrónicos con los cuales se pueden generar planos sencillos, y otros de uso más complejo que incluso pueden modelar en 3D las rutas de tubería o canalizaciones, cuantificar materiales, etcétera.
Cuando se realizan labores de reacondicionamiento o ampliación de instalaciones eléctricas, es importante contar con un plano para prever riesgos asociados al uso de la energía.
Sea cual sea la herramienta que uses, o incluso que lo realices a mano, es importante manejar información veraz y actual. Recuerda que la seguridad que brinda la instalación eléctrica está relacionada directamente con la persona que lo proyecta.
Para las instalaciones eléctricas no existe una regulación oficial que haga obligatorio el mantener el plano actualizado, al menos a nivel residencial. Es cierto que se solicita como principios fundamentales del proyecto eléctrico, planos y memorias técnico-descriptivas, pero la realidad es que no siempre se llevan a cabo.
Agradecimientos a: Ingeniero Hernan Hernandez